jueves, 3 de diciembre de 2009

Quiero añadir...

Por Antonio Alonso.


Por alguna razón, de un mes para acá mi blog ha recibido casi 1000 visitas (casi de 30 por día, pueden verificarlo dando clic en el contador), y eso ponderando un promedio, pero la actividad intensa surgió a partir del jodido correo que jodidamente pasó a joderme, envidado desde una cuenta desconocida pero firmado con mi nombre.

En fin, no soy de los que dicen que su página "tiene apenas 15 visitas diarias", no necesito alimentar mi ego de ese modo, porque ni monitoreo mi blog con regularidad -para empezar-, veo más seguido las Olimpiadas.

Pero bueno, quiero hacer énfasis en una frase que dije el momento de mi defensa y que nadie comprendió, pero ahora que se han fobiado, quizás ya le agarren la onda:

"...se recuerda que, durante la visita de Dante Delgado, en las instalaciones de la Asociación Ganadera, le cayó un mango en la cabeza. “Hubo quien pensó que fue a propósito ó niños que jugaban sobre los árboles. Esto acumula resentimientos contra la enajenada comunidad”..."

Una cosa por la que felicito ampliamente a todos mis compañeros es la integración de la comunidad estudiantil -en la Facico UV- en una Asamblea, veo en ésto un futuro brillante, algo más que prometedor; con este organo basado en el debate y la asimilación que creará un sentido común en todos podremos ponernos de acuerdo para solucionar nuestros problemas y establecer nuestras propuestas antes de que pasen a instancias superiores; incluso para aclarar diferencias, establecer diálogo y, como fin primordial y último, conocernos mejor como CUERPO estudiantil.

Se calificó como "una salvajada" lo que hacíamos en la Asamblea. Repruebo la calificación, pues nos ha costado mucho tiempo, tiempo que desde el punto de vista de CLUB FACICO -cuyo objetivo es la integración de la comunidad estudiantil- equivale a 2 años y medio, pero que en realidad es una cifra mayor. No quiero citarlo, pero quizás nos debamos remontar a los años 90's y, en un ámbito mayor, al '68.

De cierto modo, SÍ, se trató de una salvajada. ¿Por qué lo digo? Reflexiono el comentario de Sandy en su publicación y el ejercicio que intentó hacer Peniley esta tarde. ¿Qué es lo que realmente queremos en este momento? No creo que sea castigar a alguien (y no lo es, se lo remarqué a Raymundo ayer martes), pues queremos salvar a otros de un castigo, incluso Peniley dijo que se alguien castigaba a Karla Briseño ella -y en lo personal yo también- intentaría ayudarle de igual manera. Lo que queremos es un diálogo con una mentalidad no viciada, no condicionada, abierta; que "no nos acercamos a la Dirección", SÍ, la Dirección tampoco se atreve a preguntar "¿qué onda?", se limita a observar por la ventana.

No hay por qué cortar cabezas. Las cacerías de brujas terminaron hace un par de centurias. Estoy cansado, me da flojera el sólo hablar de problemas; sólo falta que me salga una úlcera. Después de la visita de la compañera acabé tan enojado -y créanme que nunca me enojo, hasta me dijeron que ni se notaba que lo estuviera, que bueno que se controlarme- que la agarré contra "Jonkie", no para agredirlo sino para reírme, me hizo falta liberar una presión que venía acumulando desde quien sabe cuando y ésto me vino a amolar; necesitaba gritar o llorar, pero la risa me hizo mejor, en medio de sarcasmos, burlas y chistes me tranquilicé.

No tenía por qué pasar ésto, aunque ya nos planteamos posibles razones, nada queda en el imaginario.

Créanme, hay profesores que no le desean una JUNTA ACADÉMICA ni a sus peores enemigos -si los tuvieran-. Yo tampoco quiero volver a vivir una. Primero que nada; "que weva", segundo: se resuelva lo que se resuelva, puede que no cabemos contentos, o nos peleemos, o sigamos en las mismas.

Es por esto, y otras cosas que quizás paso por alto, que veo un futuro más próspero en la Asamblea de los estudiantes de la FACICO, a cuyo grupo de FACEBOOK recién me integré. ¿Se imaginan que a través de un diálogo transparente podamos enviar propuestas a la Universidad para mejorar, desde el punto de vista de los comunicólogos, estrictamente, y sin la intervención oficialista de los profesores? Como ya dije, también resolver nuestras diferencias, integrarnos y evitar la molestia de embarazosas juntas en la Dirección para que regañen a alguien.

Con todos como testigos, un simple pinche apretón de manos y ¡ya!, a chingar a su madre. Borrón y cuenta nueva.