jueves, 6 de noviembre de 2014

¿Por qué hace tanto calor?

Por Antonio Alonso.

¿Sabía que, desde la década de los 80’s, hemos emitido cerca de 400 mil millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera? Para ser una cantidad tan grande, es curioso que no podamos verlo, pero éste mortífero gas resulta ser prácticamente imperceptible.

Entre China y Estados Unidos producen cerca del 50% de éste contaminante, que procede principalmente del uso de combustibles fósiles.

Es lamentable que desde 1878, en la Exposición Universal de París, ya se hayan dado a conocer los beneficios del uso de la energía solar, a través de un invento de Augustin Mouchot y se haya preferido el uso del petróleo porque resultó ser aún más barato y fácil de obtener que el carbón.

El emisor de CO2 más grande con que cuenta la naturaleza es el gas volcánico, que no alcanza ni el 10%. El consumo de carbón representa el 44% de las emisiones globales de éste gas, seguido por el 36% del que se produce por el uso de petróleo, de acuerdo con estadísticas del Earth Policy Institute.

Aparentemente, el petróleo y otros combustibles fósiles, así como algunos recursos que hoy sabemos que no son renovables, en algún momento de la historia -posiblemente durante la Revolución Industrial- fueron considerados “recursos abundantes”, y fue como inició la carrera por su explotación y comercialización, y con sus bajos costos acabaron con el sueño de la energía limpia.

La acumulación de dióxido de carbono en la atmósfera produce algo llamado “efecto invernadero”, y los científicos ambientalistas tienen el 95% de la certeza de que se debe mayormente al uso de 
combustibles fósiles.

El efecto invernadero consiste en que ésta nube de gases impide que la Tierra proyecte de vuelta la radiación que emite el Sol, provocando que todo ese calor sea absorbido por la superficie que algunos denominan “oscura”; la superficie “blanca”, la que refleja naturalmente ésta energía calorífica, es la de los hielos polares.

De acuerdo con el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), desde el año 1906 al 2005, la temperatura media de la superficie terrestre aumentó 0.74 °C, pero dentro de unos cien años, podría aumentar en seis grados.

Esto ya supone graves riesgos en la agricultura, pues por cada grado por arriba de la media disminuye un 10% el rendimiento de los cultivos de cereales como trigo, arroz y maíz, según estudios de José Larios Martón, investigador del Consejo Andaluz de Medio Ambiente.

Por si fuera eso poco, durante el siglo pasado los niveles del mar aumentaron unos 17 centímetros, y se espera que, al finalizar éste siglo, el nivel aumente unos dos metros. Además, los niveles de tierra congelada en invierno disminuyeron 7% durante todo el siglo XX.

Las concentraciones de dióxido de carbono en la atmósfera alcanzan ya niveles que no se han visto en 650 mil años, la desaparición de los hielos glaciares está a punto de llegar al punto de “no retorno”, de acuerdo con observaciones de la NASA y la Universidad de California. La National Oceanic Atmospheric Administration (NOAA), dice que es el nivel más alto en 2.1 millones de años.

"Los glaciares seguirán derritiéndose hasta que desaparezcan, y el hecho de que reaccionen casi simultáneamente señala una causa común", que es el aumento de las temperaturas en el océano que está haciendo que los glaciares se contraigan y derritan en el mar, asevera Eric Rignot, profesor de Ciencias del Sistema de la Tierra de la Universidad de California y glaciólogo del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena.

Y la cosa se pone peor, pues el permafrost (un tipo de hielo que existe en las regiones más frías del planeta, y que ha estado ahí por cientos o miles y quizás millones de años), tiene doce años que ha comenzado a derretirse y contribuye a la liberación de gases de efecto invernadero a la atmósfera, esto según el Centro de Permafrost (CENPERM) en el Departamento de Geociencias y Administración de Recursos Naturales de la Universidad de Copenhague, en Dinamarca.

El permafrost ocupa cerca del 16% de la superficie terrestre y el fondo marino, y almacena cerca de 1672 billones de toneladas de CO2 y metano, una cantidad –dicen- similar a la que está contenida en la atmósfera. El metano tiene unas cien veces el poder de efecto invernadero del dióxido de carbono.

Queda claro. Estamos a punto de alcanzar el punto de no retorno, la National Oceanic Atmospheric Administration (NOAA) y el Instituto Polar Noruego dicen que ese punto podía ser el año 2017; y tenemos de aquí a entonces  para estabilizar la situación y reducir las concentraciones de gases invernadero por debajo de niveles que “no supongan disparar mecanismos de retroalimentación que hagan el calentamiento global imparable”.

¿Aún te preguntas por qué hace tanto calor hoy? ¿Qué rayos estás haciendo al respecto?

miércoles, 13 de agosto de 2014

Pasos por la humanidad. La promesa de Voyager 1.

Por Antonio Alonso.


Es un error asumir que los conocimientos no pueden ser corregidos por un descubrimiento nuevo, sobre todo si se trata de cosas antiquísimas, por ejemplo las constelaciones. Hace más de dos mil años, los griegos asentaron la existencia de constelaciones estelares representando a dioses y otras entidades mitológicas.

Hoy sabemos que el universo se expande, las estrellas avanzan y se desplazan, por lo que algunas constelaciones de la antigüedad se han deformado y, en el futuro, podrían adquirir otra forma cualquiera, quizás Sagitario se convierta en Radiofaro.

Otro asunto, por cierto cómico, es que a principios del siglo pasado no se sabía por qué no es posible ver a través de la atmósfera de Venus. Al observar una masa de vapores, los astrónomos pensaron que posiblemente una fauna y vegetación primitivas, así como elementos terrestres, exhalaban sus gases a la atmósfera. Concluyeron la existencia de dinosaurios. La ciencia contemporánea nos ha revelado que se trata de una densa capa tóxica de dióxido de azufre.
Y así como se han explorado los planetas cercanos, se explora el entorno galáctico. En el verano de 1977 fueron lanzadas las sondas interestelares Voyager 1 y 2, para enviar fotografías del universo a las bases en la Tierra, que ya nos permiten conocer cuál es nuestra posición en la galaxia y la forma y distribución de los sistemas vecinos.

Ambas sondas llevan consigo un disco de oro, llamado The Sounds of Earth, se trata de un disco gramófono –es decir que tiene la forma de un disco de acetato, pero este es hecho de oro-. Carl Sagan (1934-1996), astrónomo estadounidense y divulgador científico, dijo que "la nave espacial, y el registro, solo serán encontradas si existen otras civilizaciones capaces de viajar en el espacio interestelar. Pero el lanzamiento de esta botella dentro del océano cósmico dice algo muy esperanzador sobre la vida en este planeta".

El disco contiene sonidos e imágenes que retratan la diversidad de la vida y la cultura en la Tierra. Se diseñó con el objetivo de dar a conocer la existencia de vida en la Tierra a alguna posible forma de vida extraterrestre inteligente que lo encontrase, y que además tenga la capacidad de poder leer, entender y descifrar el disco. El contenido de la incluye saludos en 55 idiomas, música y sonidos del mundo, un mapa de nuestro sistema solar, anatomía humana, entre otras cosas.

En 1990, cuando Voyager 1 se encontraba a punto de salir de nuestro sistema solar, a unos 6 mil millones de kilómetros de la Tierra, la sonda tomó una fotografía de nuestro planeta, en la que un error de óptica situó a la Tierra sobre un haz de luz, lo que trajo una compleja reflexión filosófica de Sagan:

Desde este lejano punto de vista, la Tierra puede no parecer muy interesante. Pero para nosotros es diferente. Considera de nuevo ese punto. Eso es aquí. Eso es nuestra casa. Eso somos nosotros. Todas las personas que has amado, conocido, de las que alguna vez escuchaste, todos los seres humanos que han existido, han vivido en él. La suma de todas nuestras alegrías y sufrimientos, miles de ideologías, doctrinas económicas y religiones seguras de sí mismas, cada cazador y recolector, cada héroe y cobarde, cada creador y destructor de civilizaciones, cada rey y campesino, cada joven pareja enamorada, cada madre y padre, cada niño esperanzado, cada inventor y explorador, cada profesor de moral, cada político corrupto, cada “superestrella”, cada “líder supremo”, cada santo y pecador en la historia de nuestra especie ha vivido ahí —en una mota de polvo suspendida en un rayo de sol.


La Tierra es un escenario muy pequeño en la vasta arena cósmica. Piensa en los ríos de sangre vertida por todos esos generales y emperadores, para que, en gloria y triunfo, pudieran convertirse en amos momentáneos de una fracción de un punto. Piensa en las interminables crueldades cometidas por los habitantes de una esquina de este píxel sobre los apenas distinguibles habitantes de alguna otra esquina. Cuán frecuentes sus malentendidos, cuán ávidos están de matarse los unos a los otros, cómo de fervientes son sus odios. Nuestras posturas, nuestra imaginada importancia, la ilusión de que ocupamos una posición privilegiada en el Universo... Todo eso es desafiado por este punto de luz pálida. Nuestro planeta es un solitario grano en la gran y envolvente penumbra cósmica. En nuestra oscuridad —en toda esta vastedad—, no hay ni un indicio de que vaya a llegar ayuda desde algún otro lugar para salvarnos de nosotros mismos.


La Tierra es el único mundo conocido hasta ahora que alberga vida. No hay ningún otro lugar, al menos en el futuro próximo, al cual nuestra especie pudiera migrar. Visitar, sí. Colonizar, aún no. Nos guste o no, por el momento la Tierra es donde tenemos que quedarnos. Se ha dicho que la astronomía es una experiencia de humildad, y formadora del carácter. Tal vez no hay mejor demostración de la locura de la soberbia humana que esta distante imagen de nuestro minúsculo mundo. Para mí, subraya nuestra responsabilidad de tratarnos los unos a los otros más amable y compasivamente, y de preservar y querer ese punto azul pálido, el único hogar que jamás hemos conocido.

Aunque en los últimos veinte años, se ha descubierto al menos una decena de planetas con las condiciones de albergar vida, nos tomaría varias generaciones llegar a ellos, por lo que sí, la Tierra es donde debemos quedarnos por ahora. Y, mientras tanto, debemos crear una nueva cultura global, generar una visión a futuro como una misma especie, dependiente de los mismos recursos y agobiada por los mismos problemas.

Los recursos que necesitamos comienzan a escasear y son acaparados por los particulares que tienen el mayor poder adquisitivo. Pronto nos quedaremos sin combustibles fósiles, algunos dicen que en cien años. A la fecha, ya necesitamos una cantidad de alimentos equivalente a los producidos por tres planetas para satisfacer las necesidades diarias y la calidad del aire y el agua en muchas regiones es tóxica.

El hombre cree de veras que tiene una posición privilegiada en el universo y que todo está a su disposición, pero hay límites. Dado el caso de poder colonizar un nuevo mundo, ¿qué haremos de él? ¿Será nuestro pacífico y respetado nuevo hogar o también agotaremos sus recursos y acabaremos con la fertilidad de su superficie?

¿Cómo nos vemos, como humanidad, dentro de cincuenta años? ¿Y dentro de cien o doscientos? Oriente medio está en guerra constantemente, China y Japón podrían entrar en conflicto por las turas comerciales del sureste asiático, Corea del Norte tiene suficiente arsenal nuclear en manos de un Nini como para destruir el mundo unas cien veces, los polos se están descongelando y el 40% de la superficie de la Tierra es desértica, lo que hoy afecta a casi dos mil millones de personas.

Eso, estimado lector, le espera a nuestras colonias en el espacio. Podemos tener grandes avances tecnológicos en los últimos sesenta años, pero necesitamos avances de conciencia. Necesitamos aprender a proyectar, colectivamente, lo que queremos ser y hacer no dentro de diez o veinte años, sino dentro de cincuenta, cien o doscientos años. Analizar los recursos que vamos a necesitar, tasas de crecimiento poblacional, distribución espacial y urbanística, rediseños de arquitectura, legislaciones adhoc que permitan el desarrollo cultural e intelectual necesario para mantener unida a la civilización futura.

¿Dónde estaremos, qué haremos? Hoy nadie lo sabe, y nadie más allá de la Estación Espacial Internacional sabe que estamos aquí. A nadie le importan nuestros asuntos más que a nosotros.

Y, si nosotros no nos preocupamos, ¿quién se va a preocupar? Carl Sagan sabía que un análisis así debe hacerse, y era optimista al respecto.

Dentro de un milenio, nuestra época se recordará como el tiempo en que nos alejamos por primera vez de la Tierra y la contemplamos desde más allá del último de los planetas, como un punto azul pálido casi perdido en un inmenso mar de estrellas.

jueves, 26 de junio de 2014

Política de privacidad.


Por Antonio Alonso.

Todos hemos visto, en alguna ocasión, los anuncios televisivos o radiofónicos acerca de la protección de los datos personales y los anuncios de privacidad con que deben contar quienes soliciten nuestra información particular.

La ley obliga a las instituciones públicas y privadas a hacer público un aviso de privacidad en que aclare para qué se usarán sus datos personales y contra qué se protegerán.

¿Crees que las empresas e instituciones gubernamentales cuidan la confidencialidad de su información personal? ¿Crees que tienen el cuidado necesario? ¿Tienes el cuidado necesario con sus datos personales?


Así es, no sólo las instituciones públicas y privadas, sino uno mismo es quien debe cuidar a quién le proporciona algún dato, por insignificante que sea. Posiblemente has llenado un talón de alguna rifa o sorteo, prestado tu firma y nombre para alguna denuncia ciudadana, o incluso entregado una copia de su credencial de elector o comprobante de domicilio al contratar algún servicio. ¿Qué tanto publicas en tus redes sociales?

Nuestra información tiene un valor económico, quizás no para uno, pero sí para otros. Además, puede afectar la seguridad personal o familiar el qué tanto se sepa de uno.

Por un lado, están las empresas de mercadeo, a quienes les sirve ésta información para algún estudio o promoción. Los lugares que visitas con frecuencia, el modelo del teléfono con que se toman las fotos, lo que uno come, lo que uno escucha, lo que nos gusta o disgusta, el lugar donde se estudia o donde se reside, color favorito, mascotas, autos, etcétera. Las redes sociales son el principal proveedor de información personal en lo que va del siglo.

¿Sabes cuánto cuesta tu información personal? En Tepito llega a costar hasta cincuenta mil pesos una base de datos del padrón de electores completo del IFE (ahora INE). El cómo lo consiguen es otra cuestión.

Si alguna vez se te has preguntado por qué le llega tanta publicidad indeseada y personalizada a tu domicilio o correo electrónico, con seguridad alguien posee tus datos. Nombre, domicilio y correo electrónico. Y si a esto le sumas un directorio telefónico de dispositivos fijos o celulares, alguien podría darte un susto.

Por otro lado, las instituciones bancarias tienen la información completa, nombre, dirección, teléfono, capital, límite de crédito, en qué gastas y dónde.

Internet es asunto aparte. En cuanto uno acepta el contrato para abrir una cuenta de redes sociales, se ceden los derechos de la información que se publica, así como fotografías y datos generados. Una sola foto puede ofrecer más información de la que aparenta.

Tu rostro también es un dato privado, y son conocidos los casos en que algún diseñador deshonesto toma alguna fotografía o video y los convierte en pornografía, lo que afecta la imagen personal y, en ocasiones, termina como un caso de bullying.

Google, por ejemplo, sabe lo que ves en internet y lo que mandas por correo. De pronto, esas visitas tuyas a las páginas porno ya no son tan seguras.

Hacia finales de la década pasada, Alemania proponía que las cuentas de redes sociales y la información que en ellas se ofrece se empleen como “tarjeta de presentación”, lo que puede ser muy práctico si uno cuida lo que publica –o devastador si no-.

Pero este año, en España, se promovió la llamada “Ley de Olvido”, que permite a las personas residentes de la Unión Europea solicitar que la información irrelevante o perjudicial acerca de ellos, publicada en internet, sea suprimida.

Los datos personales pueden convertirse en un asunto de seguridad. Hay quienes los venden y no sabemos a qué clase de personas; y, al parecer, tampoco sabemos la calidad moral de los individuos a quienes les confiamos nuestros datos. Puede ser desde una simple llamada telefónica para ofrecer un producto hasta una extorsión en que den salto y seña  sobre nosotros y nuestras familias. Entre otros muchos casos.

Con la llegada de las nuevas tecnologías de la información y la era digital, nos estamos volviendo “transparentes”. Otras personas pueden vernos y saber quienes somos, como si se tratara de una carpeta abierta, clasificada en varias categorías.

¿Cómo te sentirías si el colegio hiciera públicas tus exámenes con sus calificaciones? ¿Qué tal si el servicio médico diera a conocer tu historial de salud o de repente te llegue publicidad “exclusiva” de tus artistas o marcas de ropa favoritos? ¿O que Hacienda haga públicas tus deudas, Facebook tu lista de amigos y la telefónica tu lista de contactos frecuentes?

Ya no te sentirías tan seguro, ¿verdad?

Cuida tu información personal, fíjate bien a quién se la das. No uses las redes sociales ni internet tan a la ligera. Exige la declaración de privacidad a quien te pida tus datos personales.


domingo, 15 de junio de 2014

¡Soylent Green está hecho de gente!

Por Antonio Alonso.


“¡Soylent Green está hecho de gente!”, gritaba Charlton Heston hacia el final de la película Cuando el Destino nos Alcance (Soylent Green, 1973). En un futuro posible, plantea la película, allá por el 2022, la Tierra está sobrepoblada, árida y deforestada, y es regida por una pequeña élite que controla la política y la economía, además de ser el único sector que tiene libre acceso a productos como carne y vegetales, agua potable y medicinas.

La única fuente de alimentación para el resto del mundo, que vive amontonado, sigue el argumento, son el Soylent Yellow y Soylent Red,basados en concentrados vegetales. Luego aparece Soylent Green, basado en plancton.

Las personas morían por montones en la calle, ya sea por hambre o enfermedad, y grandes grúas se dedicaban a recoger los cuerpos para transportarlos a fosas comunes, según decían las autoridades, por la falta de espacio.

Heston, en el papel de detective, intenta solucionar un asesinato para encontrar al final que la empresa Soylent y su producto, Soylent Green, eran un gran engaño. Soylent Green estaba hecho con los cuerpos que recogían de la calle, transformados en crujientes galletitas verdes con los que alimentaban a todo el mundo. Una referencia a esto la tenemos en la película Cloud Atlas, en la escena del barco en Corea del Sur.

¿Suena familiar el panorama que se plantea? Pareciera que vamos para allá. Desde 2013, el Foro Mundial para la Naturaleza (WWF), aseguró a través de un estudio que el consumo mundial de recursos naturales superan lo que la Tierra puede renovar. En ese mismo año, durante un periodo de ocho meses, la humanidad consumió todos los recursos que la naturaleza puede producir en un año, asegura WWF.

El pasado 23 de abril, Día Mundial de la Madre Tierra, el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, dio otra alerta, diciendo que la tasa actual de consumos naturales es insostenible, para lo que se necesitaría un cambio urgente en las actitudes  y políticas de todos los pueblos, invirtiendo más en energías sostenibles.

El Presidente de la Asamblea General de la ONU, John Ashe,aseguró que esta estrategia global “debe promover una firme ética medioambiental y enfatizar la interconexión de la humanidad con la naturaleza.

WWF menciona que algunas de las políticas públicas aplicables a ese fin podrían ser  el ofrecimiento de un transporte público de buena calidad y menos contaminante, la construcción de ciclovías y el estímulo al consumo responsable.

Por su parte, la Secretaria General de WWF Brasil, aseguró que “mientras ello no ocurre, nosotros podemos hacer nuestras opciones recordando que nuestro planeta es finito, así como nuestra cuenta bancaria”.

Jim Leap, Director General del mismo organismo, remarcó el uso sostenible de los recursos naturales, pues  "Para asegurarles un futuro limpio y sano a nuestros hijos, es necesario preservar el capital natural que nos queda y cuidar mejor al planeta al que llamamos hogar".

Una muestra drástica del deterioro de la Tierra es, por ejemplo, la pérdida anual de más de 200 mil toneladas de hielo tan sólo en Groenlandia. Michelle Thaler, científico de Centro de Vuelo Espacial de la base Goddard de la NASA, aseguró que el derretimiento de los glaciares acelera la subida en el nivel del mar a un ritmo de dos milímetros por año entre 1971 y 2010. Ésto es, agua no consumible que causará graves daños.

La Tierra puede alcanzar los 9 mil millones de habitantes para el año 2050 y la economía global consumirá cada vez más recursos narutales, aletra Achim Steiner, Subsecretario General de la ONU durante el informe del panorama ambiental de 2012. "Si continúan las actuales tendencias, si prevalecen los actuales patrones de producción y consumo de recursos naturales y no pueden ser revertidos, entonces los gobiernos presidirán durante niveles sin precedentes de daño y degradación", señaló Steiner.

Para el año 2050, asegura WWF, se necesitarán los recursos completos de tres planetas Tierra para atender las necesidades de la población;esto sin considerar que la salud de los ecosistemas ha decaído en más de 30%desde 1970.

Un ilustrativo ejemplo para comprender la enorme cantidad de agua que necesitamos para mantener nuestro ritmo de vida actual. Para conseguir un café servido en un vaso desechable son necesarios 140 litros de agua. Si le añadimos azúcar y leche, aumenta a 200 litros.

Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), el cambio climático puede dejar un severo daño económico dehasta 2% anual del Producto Interno Bruto para el año 2100, si las temperaturas aumentan un promedio de 2.5 grados. Lo anterior es muy posible, pues los actuales modelos sugieren que las emisiones de gases que producen el efecto invernadero podrían duplicarse durante los próximos 50 años.

Evidenciamos, así, que la ciencia ficción es casi profética, nos encargamos de hacer que la magia del cine se vuelva realidad, sin importar cuán oscura sea la historia que nos cuenten.

A ese ritmo, quizás terminemos consumiendo el único recurso que quede sobre la Tierra, nosotros, hechos galletitas; y quizás ni nos demos cuenta. 

martes, 20 de mayo de 2014

LIBERTAD DE EXPRESIÓN: DE LOS PALEROS, LA REPRESIÓN Y LA CENSURA.

Por Antonio Alonso.


A cerca de dos semanas de celebrar el día nacional de la Libertad de Expresión, el próximo 7 de junio, cabe hacerse la pregunta de si de veras existe esta garantía. Tenemos el ejemplo en la escala nacional de la Reforma a Telecomunicaciones; pero, en la escala local o regional, aquí donde vivimos y donde pasamos el día a día, donde seguramente no es tan “malo” decir lo que pensamos, ¿existe dicha libertad?

En los próximos párrafos, se desarrollará un análisis basado en evidencia empírica, dejo a juicio individual la valoración de los hechos que a continuación se describen.



LA REPRESIÓN Y LA CENSURA.
Pareciera que no las hay. Pero las hay. ¿Por qué creen que a veces no encontramos los ejemplares de la revista Proceso que tanto esperamos? Los datos incómodos hacen que los políticos involucrados en esas líneas compren todo el tiraje para que nadie las lea. Éste es uno de los casos de censura más tranquilos.

Están los casos de quienes niegan las cosas mil veces, los que caen en la descalificación y de quienes exigen se actúe de manera represiva, un castigo por actuar de manera contraria a la corriente oficial.

Teniendo en cuenta que vivimos enun mundo multicultural, rico en diversidad, determinado por diferentes historias individuales, hay quienes se niegan a trazar rutas hacia una convivencia, personas convencidas en que la negación y la ausencia de la otredad en sus proyectos los han llevado a donde están hoy. Se niega, se repele,se persigue, se señala, se anula lo que es “diferente”. Diferente, incluso, a su realidad inventada. Esto es una relación soberbia de poder que subordina y anula cualquier posibilidad de hacer que la vida de los “otros” sea digna.

En el marco de la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU) el pasado 17 de mayo, la rectora de la Universidad Veracruzana (UV), Sara Ladrón de Guevara, anunció que ésta universidad es “espacio para todas las voces, y este debe ser un respeto total al derecho que tenemos todos los ciudadanos de expresar nuestras opiniones”. Esto a razón de la “mentada colectiva” a Enrique Peña Nieto por parte de estudiantes de la institución. Comentó que tiene tanto respeto a la libertad de expresión, que el jovenque había sido expulsado de la UV por pronunciarse contra autoridades pasadas,fue reinsertado en las aulas universitarias.

Caso que no se dio cuando Rocío Ojeda Callado, entonces Directora de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UV y actual Presidenta de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas (CEAPP) movió todos sus hilos y llamo a todos sus contactos para convocar una Junta Académica –entiéndase, un juicio-, donde el orden del día sentaba en el banquillo a cuatro estudiantes para expulsarlos; esto en diciembre de 2009.

El motivo, la distribución de un video ofensivo en que sólo uno participó, fue privado de sus derechos universitarios y expulsado inmediatamente. El verdadero motivo, el 10 de septiembre de 2009, el Consejo de Acreditación de la Comunicación (CONAC) entregó a la directora de FACICO el documento que certifica la calidad de su institución; en contra medida a ello, alumnos de la facultad distribuyen panfletos que revelan la verdadera situación de entonces: un centro de cómputo deplorable, docentes escondidos en compadrazgos y un brutal sindicalismo,instalaciones eléctricas fallonas, equipo de producción de video obsoleto, así como un mañanero aroma a fritangas. ¿También ahora?

Lo que incomodó a funcionarios, egresados y paleros, al grado de afectar la imagen de los estudiantes, así como entorpecer su proceso académico. Como lo descrito en los volantes resultaba cierto, no pudieron hacer algo; hasta que plantaron falsa evidencia y los culparon.

En el proceso de defensa, sólo uno fue expulsado, pues aparece en el video, entonces publicado en Youtube. Sin embargo, Marco Agustín Malpica, entonces catedrático y actual director de FACICO, ex delegado sindical y –dicen- compadre de Ojeda, exigía la cabeza de los cuatro, prestando oídos sordos a las defensas de alumnos y otros docentes.  Ojeda Callado pidió lo mismo, pero se saliódel recinto para atender otros asuntos “más importantes”.

A cinco años de ese día y en el marco de los 60 años de fundada la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana, sólo eso queda: dos directores represores, con cara de buenos, al hilo.

DE LOS PALEROS.
De esos sobran. Casi todos los que ostentan algún cargo público tienen los suyos, vienen en todos los tamaños, formas, colores y olores (unos más hediondos que otros). Traen varias frases paleras pregargadas y suelen repetirlas incansablemente, varían según el modelo.

En México, a quien funge de palero se le define como “persona que favorece o ayuda a alguien en términos de público que aplaude en representaciones artísticas o en mítines políticos”, o “ayudante convenenciero de grupos o de dirigentes políticos”. En Paraguay, un palero es un cocainómano; quizás sea lo mismo acá.

Si el actor político da un discurso, el palero le aplaude. Si el político se equivoca, el palero lo excusa. Si el político la riega, el palero lo justifica. Y, si al político lo atacan, el palero lo defiende hasta con las uñas.

Cualquiera puede aspirar a ser un palero, sólo necesita cumplir con los puntos descritos en el párrafo anterior, no hay que pensarle tanto. El atuendo es lo de menos, consígase una playera con el nombrede su representante favorito y ya estuvo, no importa si es una gorra, bandera,pancarta, abanico, lona, máscara, tortillero, reloj, o lo que sea, sólo debetener grabado el nombre.

Lo que siempre caracteriza a los paleros, cuando nose identifican con el método descrito, es que salen a la defensa sin pensarlo y sin pensar lo que dicen. Creen que hacen bien, pero casi siempre es mayormente perjudicial; pero para no dañar su corazoncito de palero nadie les dice nada.Si usted se encuentra con uno y es un poco más intelectual que él o ella, siempre podrá tener horas y horas de diversión garantizada.

No estamos juzgando el proceder de un funcionario o el desarrollo de una campaña proselitista, se trata de la figura del palero. Ese hombrecillo escondido en los matorrales que espera la oportunidad de causarsimpatía a su modo, tendiendo una alfombra con pétalos de rosa o dizque haciendo de guarura.

Y es que, recientemente, en la cuenta de Facebook de Alto Lucero Zona Costa, administrada por el Gobierno Municipal de Alto Lucero, cuyo alcalde es el señor Manolo Domínguez, apareció una publicación invitando al carnaval de Palma Sola, en el que habrá una corte real, batucada, comparsas y hasta una cabalgata –suena interesante-; lo curioso es que también anuncia que “los esperamos en la explanada de la Iglesia para divertirnos y gozar con excelente música”. Uno se dobla de la risa escuchando tal cosa, aparentemente incongruente, de ir a la Iglesia a gozar y divertirse.

Al hacer el señalamiento de por qué un evento público del gobierno se desarrolla en la sede de una institución religiosa, evocando al laicismo, el alcalde respondió oportunamente “debo aclarar ciertamente, que en ningún momento es un evento vinculado con la iglesia,únicamente se está prestando el espacio del Salón Social por espacio y ubicación, como lo hacen con los habitantes del pueblo que lo solicitan para alguna fiesta o reunión sin adquirir con ello ningún vínculo en nuestro evento”. Una respuesta clara y contundente.

Sin embargo, como capullo abriéndose ante los rayosdel Sol, no faltaron los paleros. Ambos invitaron a la participación proactiva por la comunidad, a sólo hacer propuestas y no críticas (aquí vamos calentando). El primero, funcionario de la oficina de Comunicación Social municipal, menciona que “enfocarnos sólo en los pequeños detalles que opacan la participación y unión de la gente no hace que un pueblo progrese, sólo genera un pueblo apático”. Más adelante, un señor de nombre Martín, escribe con un severo problema ortográfico que transcribo literalmente “como parte de esta sociedad tenemos q aportar algo y algo positivo o críticas constructivas q sean para mejorar no solo para castrar, ylo digo x mi y x todos xq como ciudadanos no hemos hecho ni madres y solo votamos veneno, yo estoy en palma y m doy cuenta d lo q pasa d lo q caresemos yde lo q necesitamos, pero los q son d aquí y están fuera no veo q hagan algo”.

¿Es de veras necesario ese nivel de agresión? En dos oraciones, a quien hizo la pregunta, le llamaron apático, antiprogresista,  no participativo, castroso y venenoso, entre otras que puedan sumarse. El alcalde ya había ofrecido su respuesta y los paleros sólo aparecieron para regarla, complicarlas cosas, generar ambigüedad, opacar la comunicación y ensuciar la imagen pública del funcionario, no fueron corteses y, en el caso de la comunicadora,no usó un lenguaje institucional.

¿Qué necesidad?

Otro ejemplo es el de los trabajadores sindicalizados de TAMSA protegiendo a su líder, Pascual Lagunes, de las preguntas de los reporteros. Esa es otra historia.



A FINAL DE CUENTAS.

En grande o en chico, la comunicación es un proceso que cualquiera puede entorpecer, voluntaria e involuntariamente. Si tienes paleros te va peor. ¿Podemos realmente decir lo que queramos, donde y cuando queramos hacerlo?

Ni en las redes sociales está uno seguro, el ciberpalero es una especie nueva, evolucionada, con un nivel de conocimientos un poco más sofisticado, que siempre está al acecho, buscando lo que dicen los demás con el afán de reportarlo.

Hablar en privado ya no sirve, no se puede saber laclase de persona que puede estar a la escucha. Y si va con el chisme, peor si cambia la versión y altera la información, habrá consecuencias, un regaño, una falta administrativa, suspensión del sueldo, despido, etcétera.

A veces no queda de otra que ignorarlo y hablar encongruencia como se piensa, ¿Cuál sería nuestra calidad moral si no?

Paleros atacando en 3…2…1…

domingo, 4 de mayo de 2014

Amar la Luna. Parte III.

Por Antonio Alonso.

*Ahora quiero saber que sigue... eres un hijo de puta.
*Jajajajaja...Poli, ¿Poli Pocket o qué?...¿Mujer hermafrodita? Jajajaja...Toño es que tus relatos sobre el grupo "Amar la luna" son tan intrigantes como sarcásticos y con cierto humor involuntario. Los amo. Soy fan.  No puedo creer que toda esta aventura detectivesca se desarrolle en el Puerto de Veracruz.
*Ya me volviste a dejar igual! otro muerto y ni madre de pistas!!!




Utilería.

En el futurista complejo de celdas parecía nunca pasar eltiempo, debido a su iluminación artificial. Cada bloque de prisioneros debíacumplir funciones específicas para la sostenibilidad del sitio, y a Fabián lehabían asignado labores en las hortalizas. Cansados, sucios y con sus uniformespercudidos, los agricultores aprovechaban cinco minutos por cada sesenta paradarse un respiro y luego volver al intenso trabajo. Era el último receso antesdel cambio de equipo; esas doce horas se sentían como el infierno con esasofocante luz amarilla y el calor de cincuenta grados Celsius. Al menos no leasignaron picar roca en las minas como Roberto, el desconocido con quiencompartía celda. Los guardias los formaron en un contingente para marcharcamino a las duchas, con sus herramientas al hombro, como si fueran armas, ysilbando tonadas de canciones viejas como MoonRiver o The Green Leaves of Summer.La primera le recordaba a Thania, a quien imaginaba usurpando el papel deAudrey Hepburn.
Marchaban sobre el camino principal, Rosenstrasse, unaamplia avenida arbolada y con abundantes rosas en ambos lados. Al fondo, se vedistante la gigantesca columna que sostiene el domo principal, con sus lucesazules subiendo y bajando como en una carrera; más allá, las chimeneas de lasfactorías, a donde se supone que van los trabajadores menos disciplinados.Nadie podía hablar sobre lo que sucedía en su lugar de trabajo; tenían algunasmañas ingeniosas para comunicar que algo estaba mal, pero no podían hacer másque especular.
En una ocasión, según le comentaron a Fabián durante susprimeras noches ahí, un prisionero recién llegado denunció maltrato por partede los guardias y cuestionó todo, algunos lo secundaron; sus trajes se tiñeronrojos, aunque no era sangre. El soporte principal también brilló en rojo, unaalarma sonó y los guardias se apartaron, lo mismo hicieron otros prisioneros.Un rayo se disparó desde lo alto y los vaporizó, dejando sólo sus ropas yalgunas piezas dentales metálicas o prótesis adheridas a sus huesos. Desdeentonces nadie cuestiona nada.
Y seguían silbando, mirando a los compañeros de los costadossólo con girar los ojos. Tenían miedo cada vez que pasaban sobre las marcas deese rayo mortífero que un día acabó con la vida de sus amigos. Alguien del tercercontingente cayó al suelo, nadie se detuvo para ayudarle, hasta que llegaronlos guardias y lo molieron a golpes, obligándole a levantarse por su cuenta.Eran curiosos los casos específicos en que usaban la fuerza.
En la ducha no había guardias, pero tampoco salidas deemergencia o respiraderos más grandes que el tamaño de una pelota de béisbol.Era el turno del baño del primer contingente, dos centenas de personas en unsilencio abrumador donde la paz era quebrantada por el choque del agua contrael suelo. Algunos rompieron en llanto, siempre lo hacían. La impunidad y laincapacidad de hacer algo para dependerse eran los sentimientos que llenaban apocos.
-Es que tenemos que hacer algo – pensó en voz alta FabiánRicarte-.
Todos se giraron hacia donde el joven antropólogo, aspirandoaire en sorpresa. Nadie se esperaba un comentario así desde hacía meses. Alotro extremo, su antisocial compañero de cuarto aplaudió con apatía. Y comenzóuna burla sínica.
-Con que el doctorcito quiere hacer su propia lucha.Adelante, que lo maten. Estoy harto de que se ponga a hablar cosas sin sentidotodas las noches, pensando por qué lo trajeron aquí, quienes son éstos tipos,etcétera. Con conclusiones descabelladas y bien pendejas. Supongo que lo deahorita debe ser la culminación de todas tus cavilaciones, ¿no? Pues,felicidades. ¿De qué vas a querer tu pizza, de peperoni o de tu puta madre?
Los demás lo abuchearon y le arrojaron jabones. Un adulto,de unos cincuenta años, le metió por la fuerza uno en la boca.
-¡Cállate, pinche Roberto! Estamos hartos también de tantamamada sólo queremos una explicación, seguro algo dicen.
-Sí, claro –replicó-. Los putitos no saben por qué chingadosestán aquí. Pues por eso, ¡por putitos, todos! Es un castigo por una vida así.¡Váyanse a la verga todos, ustedes y sus soluciones! Nada podrá sacarnos, nadieha salido nunca.
Ricarte avanzó hacia él, aun con jabón en el cuerpo, y losdemás le abrían paso. Roberto cayó de rodillas al piso, sollozando.
-Tú tienes una teoría.
-No, doctor. Chinga tu madre, vete.
Ni siquiera lo volteó a ver, pero Fabián se acercó más y seagachó, estaba molesto por esa actitud rabiosa, colérica. Le exigió de nuevacuenta que expresara lo que sabía, y nada. El turno del contingente en la duchaestaba por terminar y necesitaban saber eso.
-Debes decírmelo ahora. ¿Qué sabes?
Sonó una alarma, indicando el fin del baño. Todos salieron yfueron escoltados a sus respectivos separos. Roberto tendido en su colchón yFabián insistiendo en que le contara. Y al milésimo intento consiguió una quejay un escupitajo en la cara.
-¡Ya estuvo bueno, wey! Te dije que no. Déjame en paz.
-Sólo quiero que me digas lo que piensas, es todo. Estoyseguro de que es una versión diferente, una versión interesante, sobre todoesto. Te prometo que no lo cuento, no me río, ni te preguntaré más cosas. Nadamás dime.
Roberto se giró boca arriba y miró a Fabián un instante,luego esquivó la mirada. 
-Yo he estado allá arriba. Sé que nunca nadie ha salido nisaldrá de aquí, aunque esos caras de verga digan que sí. No tienes idea de loque le hacen a la gente. Cuando entras ahí, nada vuelve a ser tú, o tuyo. Estraumático, vomitas con sólo verlo. Cuando te hacen eso, te usan para otrascosas. Luego están esos camiones donde ponen lo que hacen, no sé a dónde van;está muy bien cuidado, no hay rótulos, no hay placas. Aunque no desperdiciannada, ahí huele a muerte. Me hicieron verlo, fue el castigo por mi pecado. Yahí estaba él, señalando lo que quería que viera y contándome con detalle lascosas. Lo odié, lo odié tanto que mi pecado se limpió.
-¿Tu pecado se limpió?
-No te diré más. Quiero estar sólo.
-¿Esto cuándo pasó?
Roberto se había quedado dormido encima de una mancha delágrimas en su almohada. Antes de terminar su descanso, Fabián reportó a sucompañero como incapacitado y se dirigió a la clínica para pedir unoscalmantes. Se encontró a Frank en el camino, quien le comentó que habíanliberado a tres personas del bloque XHG. Le preguntó si la noticia no leparecía alegre, pero Roberto ni siquiera había escuchado.
La clínica era el punto más cercano a la columna principalal que se permitía el acceso, lo siguiente eran las fábricas y la estación deenergía. Al pobre individuo se le ocurrió apreciar la columna desde su base,subiéndose a unos contenedores junto a un muro muy alto. Comenzó por la puntadel soporte, prácticamente invisible, y bajó hasta donde otros complejos leimpedían ver. Cuando vio más abajo, unos perros pastor alemán le ladraban y losguardias sonaron un silbato, le ordenaron largarse. Pero no fue todo lo quehabía, antes que obedecer, sus ojos se abrieron como queriendo tragarse todo loque veían. Pero Fabián estaba mudo e inmóvil, lleno de odio y miedo. Se cayódel lugar donde estaba e intentó llegar ahí a través del hospital, pero estabacerrado; a la vuelta, la unidad de urgencias estaba abierta, los paramédicos yel personal de la ambulancia estaban haciendo guardia.
-Oigan, necesito ayuda.
-¡Largo de aquí! No hay nada que tengas que hacer aquí,sabandija.
Se lanzó sobre los cuatro a punta de golpes. Con una patadaen la rodilla tiró a un camillero, le quitó su casco y golpeó rápidamente a unparamédico en la cabeza, dejándolo inconsciente. Los otros dos, que eranenanos, le sujetaron por detrás, Fabián dejó caer su peso sobre ellos,tronándole a uno la espalda. El restante tomó una llave de tuercas que estabajunto a la ambulancia y unos cables para corriente, que usó como chacos. Aqueltomó las piernas del otro enano y lo arrojó al pequeño ninja, que murió alinstante por la fuerza del golpe de la cabeza contra su estómago. Las tropas deélite de los cuerpos de seguridad no se hicieron esperar y rodearon la zona,apuntando al prisionero con armas de todo tipo, desde pistolas hasta riflesfrancotirador ubicados en las azoteas, reluciendo sus trajes negros, con cascoscerrados hasta la cara que fungen como máscara antigas. Unos curiosos uniformescon un pulpo de seis tentáculos dibujado sobre el pecho izquierdo.
Fabián retrocedió, cuando tocó pared se dio cuenta de queera una entrada dibujada a una imaginaria sala de urgencias de un hospital deutilería. Pronto fue arrestado. Uno de ellos, seguramente alguien de altorango, contestó una llamada por radio.
-Felicidades, mocoso. Vas a conocer al sueco –le dijo alprófugo antes de subirlo a un camión para personal Opel-.  


Arcadio.

No da resultados.¿Será que necesitemos más? De cualquier modo, ha pasado mucho tiempo y no logrover lo que me prometiste. ¡¿Dónde puta madre está lo que me prometiste?!¡¿Hasta cuándo, coño?! Estoy hasta la madre de esto, ¿no te has dado cuenta?D-e-s-e-s-p-e-r-a-d-o. Harto, angustiado. Necesito que te reportes con urgencia  en Ká-dingir -Puerta de los Dioses, ensumerio-. No, tú y todos tus hombres. Unode ellos fue identificado por la policía y varios periódicos le llaman ya “elasesino de la chaqueta de cuero”. ¿Querrías explicarme? Un descuido tan grandeno es algo que fácilmente pueda olvidar, pudo poner en riesgo todo lo que hemoshecho, ¿o será lo que has hecho? Digo, porque ya no sé quién es el que mandaaquí, tú o yo. Porque ahora resulta que tú eliges a los sujetos y envías a tuspropios matones para conseguirlos. Oh, sí;  válgame, que no te enteras de nada. Hay unoficial asignado al caso y debemos evitar que nos siga el rastro, te pondré altanto cuando llegues, porque ahora resulta que soy tu puñetero informante. Esosí, déjame decirte algo, la próxima vez que algo así ocurra, asumiré completocontrol de las operaciones y tú, aunque seas el pionero, serás “evacuado”,¿comprendes? ¿O es que también tengo que explicártelo?
Fabián no pudo ver quién hablaba con tanta prisa, lo teníanamordazado y con la cabeza cubierta; empero se trataba de algo realmente serio,a pesar de que no se revelaron detalles durante la llamada telefónica. Esta persona azotó el teléfono contra elsuelo rompiéndolo en varios pedazos.
-Y éste, ¿quién es? –dijo la voz dañada luego de gritar tantopor el teléfono, se notaba calmado y elocuente, mientras hacía gárgaras conwhisky. Le respondió uno de los guardias.
-Un prisionero del bloque THX, señor. Intentó saltar el murode la Colonia.
-¿Existe un bloque THX? Ridículo, esto es la realidad, no unapelícula de ciencia ficción. Aunque, a decir verdad, las reglas aquí soncomparables a las de esa película de George Lucas. No importa. ¿Por qué hizoeso?
-Según el prisionero, quería conseguir ayuda médica paraalguien del bloque de trabajadores.
-Y luego de eso, él…
-Sí, él fue forzado a retirarse del muro, se enfrentó contraotros guardias y luego fue sometido. Una situación controlada, señor. Pero sutraje no reaccionó para impedirle hacerlo.
-Y… ah, ¿para qué me lo has traído?
-Señor, éste es el prisionero que usted expresamentesolicitó fuera traído aquí.
Una sensación extraña, ligeramente parecida a un escalofrío,recorrió su cuerpo; un raro hormigueo en la espalda impidió que se levantara,aunque sí demostró sorpresa ante la noticia. No podía apartar la mirada,rabiosa y asesina, de aquel bulto al otro extremo de la oficina decomunicaciones. No sabía si sus reacciones eran normales ante un caso así, perosu mano derecha comenzó a temblar como si fuera un ataque de Parkinson. Iba aocurrir una confrontación, sí es normal reaccionar así. Tomó su pañuelo de sedade Indias y secó gentilmente el sudor de su frente, luego humedeció sus labiosusando su lengua con lentitud. Apoyó sus manos sobre sus rodillas paralevantarse y tomó whisky directamente de la botella. Otro sorbo de whisky paraestar seguro.
Las luces de los monitores a sus espaldas iluminaban alsujeto sentado junto a la entrada pero oscurecían su rostro. Ordenó a losescoltas hacerse a un lado. Extendió la mano para intentar descubrirle la cara,pero dudaba si hacerlo o esperar. Al final lo hizo. Una llamada del Señor N., sucelular comenzó a sonar con el Can Can de Orfeo en los Infiernos mientras elrostro de éste sujeto se desvelaba en la ligera penumbra.
Ambos se vieron sorprendidos, clavando sus miradas uno alotro, uno con rencor y el otro con sadismo.
-Mira qué bien. A ti te esperaba para después, pero creo quepodemos ir adelantando las cosas. Como seguro escuchaste, los planes vanretrasados y tú ocupas un lugar en ellos. Guardias, llévenlo a Arcadia, laciudad de los osados, para que el señor aprenda a comportarse.


Repercusiones.

Thania convivía con Bety día y noche mientras Aldoinvestigaba. De vuelta al periódico el domingo a las seis de la mañana paracubrir la guardia, Bety leía las agendas de los funcionarios y las notas rojaspara saber qué cubrir durante el día. Estaba muy concentrada en ello. Thaniapreparaba el café muy cargado, de una marca de Córdoba que siempre ofrecía undelicioso café aromático.
-¿Crema?
-Sí.
-¿Azúcar?
-Dos.
-¿Qué tan caliente?
-Para tomármelo hoy.
Sirvió el café y tomó asiento en el escritorio de enfrente,junto a la ventana con vista al obelisco que conmemora a los héroes de laciudad de Veracruz. Arriba de la ventana, enmarcado y en grande, la foto en elmejor ángulo de Chirinos resbalándose en ese obelisco. Relajadas y en susasuntos, bebían su café, cuando un gran golpe se escuchó desde la planta baja.Thania se pasó el trago rápido pero Bety escupió el café y regó el contenido dela taza sobre el escritorio y la computadora; ambas gritaron y tenían muchomiedo, eran las únicas personas a esa hora en el edificio. Afuera aún estabaoscuro y la bruma marina era espesa, impidiendo un poco la visibilidad. Sereunieron en el comedor de la oficina, respirando con agitación, Beatriz estabahistérica, casi loca y gritaba en vez de hablar. Desesperó tanto a su amiga quele dio una bofetada con todas sus fuerzas, y sólo así se calmó.  
-Ay, no, Thania. Tengo mucho miedo, quédate aquí.
-Pinche gorda, no seas pendeja. Obvio es alguien, ¿o creesen fantasmas?
Bety se puso a rezar. Thania cogió una escoba y la sostuvocon los dos brazos para usarla con precisión en caso de ser necesario. Cuandollegó a la escalera, notó que el camino hacia la entrada era muy oscuro, seescuchaban compresores, golpes y cadenas. “Seguramente es en la sala deimpresión”, pensó y siguió avanzando. En medio de la oscuridad, los golpes denuevo, TAC-TAC-TAC, desde arriba el desgarrador grito de Bety diciendo “nuncamás”. Y así otras cuantas veces, “TAC-TAC-TAC, ¡nunca más!”
La gran puerta de vidrio de cuatro pulgadas se veía invadidapor un halo de luz y la silueta de una persona. La bruma y la oscuridad nodejaban ver quién era, hasta que volvió a golpear  y Thania contestó que se acercaba, al momentoque se repetía el  agudo y molesto “nuncamás” del piso superior. Tomó su llave y abrió. Se trataba de Natalia, la jefade información del periódico.
-Niña, tardaste demasiado en abrir. ¿De qué se trata? Bueno,no me importa de qué se trata, iré a misa pero no quiero andar cargando mibolso, tómalo y ponlo en mi escritorio. ¿Vino a trabajar la fodonga de Beatriz?Dile que quiero que valla a la Agencia de Investigaciones, rueda de prensa alas nueve de la mañana sobre el caso de asesinato de ayer en el Buenavista. Mevoy. ¡Apúrate, chamaca! ¿Qué esperas?
Natalia desapareció en la bruma y unos perros callejeroscomenzaron a aullar. Thania cerró con llave, dio la media vuelta y alcanzó aescuchar que algo se dirigía hacia ella desde la calle, una especie de rasguñoy una respiración pesada. Dio unos pasos atrás y cesó el ruido, pero suinquietud le hizo acercarse de nuevo; entonces, el cuerpo de un perro seestrelló contra la puerta a dos metros del suelo, quebrando la parte superiordel vidrio de cuatro centímetros de grueso. Ahora ella gritaba, salió corriendohasta el comedor de la sala de redacción, donde su amiga.
No pudo decir una sola palabra, así que se tomó una taza decafé sin respirar, luego el recipiente entero. Empezó a contar números pacientemente,hasta que se detuvo cerca del trescientos ochenta. Respiró hondo unas cuantasveces y pudo pronunciar algunas palabras sobre el perro, luego entregó elmensaje de Natalia a Bety. Pronto dieron las siete de la mañana y llegaronotros trabajadores que se dieron cuenta de lo sucedido y llamaron a la policía.
-¿Segura que no vio más, señorita?
-No, oficial.
-La letra “N” que tiene marcada el perro, ¿cree que sea unmensaje o amenaza hacia el periódico?
-No lo creo, no conozco a alguien, persona, funcionario,grupo o sociedad cuyo nombre empiece con “N”.
El policía se retiró para hablar con el Director delperiódico. Bety se acercó con una anotación en la mano.
-Amiga, tengo algo que puede ayudar a la investigación deAldo. Acompáñame, vamos a la AVI.
Muchos reporteros se concentraron ese día, la mayoría de laprensa amarillista y escritores de revistas y rotativos sensacionalistas. Otrostantos que viven del chayote y limosnas de quienes ostentan el poder. Laminoría presente, eran los periodistas serios. Hizo acto de presencia elSubprocurador de Justicia, el Director de la AVI y el capitán Aldo Ruíz. Todosdieron parte sobre sus conclusiones acerca del homicidio que estaban tratando.El Subprocurador amenazó de muerte a todo tipo de criminal, ya harto de tantaviolencia hasta intentó instruir a las fuerzas del orden para que comenzaranuna ofensiva. Por su parte, el Director de la Agencia de Investigacionessugirió moderación y paciencia, para realizar el trabajo en orden y llegar hastalas pruebas concluyentes, así como los culpables. La prensa lanzó una lluvia depreguntas y críticas al sistema policíaco. Bety pronto abordó a Aldo antes deque se retirara, con el papel en la mano.
-Mañana habrá un evento con muchas personas y todas están en peligro.
-¿Qué sugieres?
-Tienen que protegerlos. Es un caso de vida o muerte. Verás,mis informantes me…
La interrumpieron los funcionarios estatales, quienes sellevaron al capitán para seguir platicando sus asuntos. Aldo apenas alcanzó atomar el papel, con unas anotaciones escritas a prisa, poco comprensibles.


Bibloplegia antropodérmica.
Arrojaron a Fabián al lodo, dentro de algo parecido a un gueto. Varias personas que, como él, se enfrentaron a los guardias o intentaron escapar en alguna ocasión, y ahora vivían con temor. Un hombre anciano, calvo y de ojos redondos le ayudó a levantarse y le sacudió un poco el fango con su camisa. El joven antropólogo intentó identificar su entorno, era oscuro, húmedo y apestaba a mierda. Preguntó dónde estaba.
-Le llaman Arcadia –contestó el hombre-. Es donde encierran a quienes casi logramos escapar, o que al menos lo intentamos. ¡Esos rufianes!Aquí nos torturan de la peor forma posible. La pesadilla empieza cuando descubres a dónde van quienes exentan el experimento.
Caminaron hacia una ventana lateral. Fabián estaba horrorizado, era lo más sanguinario que hubiera visto jamás. Gritos de dolor y agonía reverberan por todos lados. Era una cueva muy alta, apenas iluminada con antorchas y reflectores, con centenares de murciélagos volando entre las estalactitas. Verdugos con la cabeza cubierta desollaron a sus víctimas uno tras otro, haciendo precisos y magistrales cortes a su piel, igual que un cirujano plástico, protegiéndola, para luego arrancarla completa de un solo tirón. El grito producido podría fácilmente afectar a quien lo escuchara.
Lo siguiente eran los músculos y después los órganos, uno por uno. Los colocaban en recipientes especiales, como si estuvieran cosechando algo. Y, al llegar al corazón, era la culminación del proceso; este órgano era tratado como el obsequio de un dios, luego se depositaba en un contenedor. Al final de cada proceso, los órganos eran llevados a un área lejana y la piel se trasladaba más allá de donde la vista les permitía.
-Dicen que las usan para bibloplegia antropodérmica –dijo el hombre, pasando la mano sobre su calva en señal de desesperación-.
-¿Qué es eso? –preguntó Fabián sin apartar la vista de tan macabro acto-.
-La usan para forrar libros.
-¿Ehhh?
-Sí, verá, yo era el administrador de la Biblioteca Universitaria. En alguna ocasión se nos habló de procesos como éste, en que se usa piel humana para forrar libros.
-Pero, ¿para qué querrían hacer eso?
Todos en el lugar se miraron dudosos, la falta de respuestas hizo que algunos especularan. La versión más reconocida incluye el famoso Biblos Mórtem.
-Mejor conocido como el Necronomicón –señaló una mujer mientras se asomaba de entre la penumbra del interior del gueto-. No cabe duda que esto es satánico; alguien con un poco de humanidad no permitiría que estas cosas sucedieran. Pero tanta maldad sólo puede ser inculcada a través de herramientas del Diablo como éste libro.
Se hizo un círculo de personas alrededor de ella. Había quienes le creían y quienes no, por lo que el debate no se hizo esperar, y todos intentaron hablar a la vez. No se comprendía una sola palabra, hasta que el más anciano del grupo, un hombre alto y robusto de unos setenta años, les hizo callar. Demian, como se le conocía, hizo el papel de mediador.
-Nada es seguro, muchacho –dijo-. Es probable, también, quesean personas como nosotros, siendo castigadas. Pero quien sabe. No le hagas caso a la hermana Roberta, está loca. Pero de quien debes cuidarte es del Sueco, ese hombre blanco de allá abajo. En una ocasión, unos chicos hicieron mucho ruido, tanto que llamaron su atención y vino por ellos; les arrancó la cabeza sin previo aviso y los arrojó a los desechos.
-¿No extrajo sus órganos?
-No.
-Supongo que hay un objetivo concreto para el uso de los órganos. Ese Sueco sabe bien que el cerebro y el corazón sufrieron de un trauma, haciéndolos casi inservibles para un trasplante, por ejemplo. ¿Hace cuánto fue eso que comenta, Damien?
-Seis años.
Fabián se sorprendió por el tiempo que llevaba esa gente encerrada allí. Sin embargo, estaba interesado en esa anécdota que le contaron,pues sería la púnica forma de escapar, hasta el momento.

La niñera.
Sentaron a Aldo Ruiz y a Javier Morán en el banquillo. Frente a ellos, el Director de la AVI desplegaba un plano del Centro de la Ciudad de Veracruz. “Esta es la avenida Zaragoza”, señaló y comenzó a delimitar un área.Hizo de conocimiento de los detectives que una manifestación se llevaría a cabo para protestar en contra de la violencia hacia los homosexuales. El capitán Ruiz no se extrañó, Beatriz ya le había advertido de ese evento unos minutos atrás.
-¿Qué hay de extraordinario en esta manifestación?
El Subprocurador de Justicia Corona saltó de su asiento,furioso.
-No tengo que recordarle, capitán, la reciente y creciente ola de asesinatos de miembros de la comunidad lésbica y gay. Es éste tipo de gente la que se va a postrar en el centro de nuestras calles, enojados,gritándonos, aventándonos cuanto encuentren. Los encabeza un grupillo. Eh, ¿cómo se llama?
-Amar La Luna, señor.
-Exacto. Amar la Luna, cosa que me extraña, pues hace más de seis años que no operan. Me dijeron que ese nombre es una de sus pistas, por lo que creemos que podrían todos estar en peligro. También, en nuestro archivo figura que varios de los miembros de éste grupo han desaparecido poco a poco,sin rastro. Es imperante asegurar la integridad de éstas personas.
-¿O sea que seré niñera? –dijo Aldo con sarcasmo-.
-Sí, y si es necesario limpiarás mucha caca. Deberás ponerte en comunicación con Oscar Blanchet, es uno de los organizadores. Y, sólo para que lo sepan, no es fácil encontrarlo.
Morán no pudo ocultar su intriga. Al terminar la reunión, se dirigían de la subprocuraduría al Bar La Oruga, donde se sabe que Blanchet pasa sus tardes desde los últimos seis años.Charlaron en el camino. El sargento revisó varias veces la información de su sujeto en la base de datos, estaba limpio; sin fotografías ni archivos del periódico.
-Esto es raro. Normalmente se tiene registro de quienes dirigen o encabezan asociaciones y grupos de personas.
Siguió buscando directamente en internet sin resultados. Aldo estaba cansado, hacía algunos días que no descansaba y no podía dejar de pensar en lo que habría de hacer la mañana siguiente para proteger a quién sabe cuántos. “Pinches putos”, susurró.
Llegaron a los médanos de arena de la Reserva 4, “refundido” en un área olvidada de Veracruz. El auto apenas pudo avanzar hasta que llegaron a un lugar casi en obra negra, pero que funcionaba como bar. Afuera lo identificaba una lona con la imagen de una mujer semidesnuda enseñando los pechos.
-Alguna vez vine aquí por un vaso con agua, es que tenía sed –comentó Ruiz-.
Eran casi las seis de la tarde y empezaba a oscurecer; dentro estaba menos iluminado que afuera, apenas brillaban unos focos rojizos mal distribuidos y unas luces de neón al fondo,detrás de la barra. Sentados a la izquierda un par de albañiles, recién llegando de una obra y mal gastando la raya con una caguama cada uno; por el otro lado,dos mujeres regordetas y viejas revisando un catálogo de avón. El encargado del bar acomodaba unas cajas de cerveza. Aldo golpeó la barra con los nudillos paral lamar su atención, pero los agentes iban tan bien vestidos que saltaban a la atención de todos y, por lo mismo, los ignoraban. Así que volvió a golpear.
-¿Qué madres quieres, poli?
Aldo se rió.
-¿Poli? ¿Poli Pocket o qué?Queremos cerveza.
-Aquí no hay nada para ti,Poli –dijo el hombre mientras sujetaba un machete escondido bajo la barra-.
Los albañiles se levantaron para observar los movimientos de los agentes. Las mujeres se hicieron a un lado, abrazándose mutuamente.
-Señores –intentó prevenir Morán-, no quieran cometer un grave error.
-Oh, no, pinche puto. Aquí no cometemos errores. ¿Verdad, muchachos?
Los albañiles asintieron con un “ajá”, tomaron tus botellas de caguama y las quebraron para usar los filos como arma. La cerveza se regó por todo el piso, manchándoles hasta la cara. Las prostitutas del bar no sabían si permanecer ahí o salir, pero el miedo les impidió reaccionar. Los hombres se acercaron a la barra, el encargado empuñó el machete y se prepararon para aventárseles a golpes. Aldo sacó de debajo de la camisa su Mágnum 44, a la vez que los otros retrocedieron y Morán aprovechó para tomar su pistola Walter.
-Esta pistola es poderosa,podría partirles la cabeza de un tiro –aseveró el capitán-. ¿Creen estar de suerte hoy?
Los hombres saltaron al ataque. El agente disparó en tres ocasiones, acertando cada disparo. El cuerpo del barman salió proyectado contra su barra de licores, tirándole todo encima,y los otros dos bañaron de sesos el techo. Las mujeres gritaron horrorizadas,la sangre cubría sus semblantes y sus ropas. Mientras Javier Morán aseguraba el lugar, Aldo se acercó a ellas.
-Oruga, maldita perra. A tite buscaba.
Oruga era la más fea,gorda, vieja y flácida de las dos prostitutas, que también hacían de meseras. Ella es, a su vez, la propietaria del establecimiento ilegal. Es conocida por traficar drogas con diferentes cárteles y cerrar exitosos tratos teniendo sexo.Una mujer hermafrodita que supo aprovechar de manera extraña su condición y sus contactos con diferentes proxenetas y redes de prostitución. Controlaba una envidiable red de comunicación en que se manejaba información hasta de altos funcionarios.
-A ti no –dijo Aldo a la otra chica-, será mejor que te vayas ahora. Dime, Oruga. ¿Dónde encuentro a Blanchet? Más te vale decírmelo
-No lo conozco. Déjame en paz, pendejo.
-Mujer, no me obligues a hacerte lo que hice a esos cabrones.
-¿Me dejarás en paz y  pagarás los daños?
-Sí, lo que quieras –ledijo mientras pasaba la mano por sus enormes nalgas sintéticas-.
-Oquei. Oscar Blanchet está en Catarina's a ésta hora. Él viene aquí solo hasta que anochece.
Ruiz la soltó y le rompió el cuello. Javier gritó y revisó el cuerpo.
-Pero, ¿por qué hizo eso,capitán?
-Muchacho, nos dio una pista gigantesca. Además, no tengo dinero para pagarle. Vámonos.
Salieron y la oscuridad reinaba. Las luces de las casas y el paupérrimo alumbrado público eran luces remotas, perdidas en el fondo. Los policías no se ubicaban, no podían ver su auto. Tres bolas de fuego salieron de la nada e impactaron contra el vehículo,haciéndolo estallar. Sólo así se iluminó un poco de la calle. Tomaron sus armas y se pegaron espalda con espalda. El grito desgarrador de una mujer rompió el silencio inquietante de la situación, corrieron a buscarla un par de cuadras adelante, esquivando algunas rocas difícilmente visibles.
Era la otra mesera de La Oruga, ardiendo en llamas. Voltearon a todos lados y otra ronda de llamas se dirigía hacia ellos a toda velocidad. Morán las esquivó, pero Aldo comenzó a dispararles haciéndolas estallar en el aire. Otras dos más desde atrás y por un costado, pero su puntería lo salvó nuevamente. Recargó el arma, las balas se le cayeron y no podía ver de dónde recogerlas. En esta ocasión, múltiples objetivos se acercaban y Aldo prefirió tirarse pecho a tierra. Morán les disparó a todas fallando en una, que impactó cerca de Aldo.
Una carcajada siniestra se oyó a lo lejos, cerca del viejo huerto de mangos. Aldo tardó en levantarse, laexplosión lo dejó aturdido.  Javier le ayudó a moverse y se dirigieron a los árboles de mango, adentrándose. Habían caído en una trampa, cuando la risa se escuchó de nuevo, el follaje de todos los mangos se prendió y expulsó brutales llamaradas. Una silueta humanoide apareció al otro lado del terreno y, cubriéndose detrás de uno de los árboles,arrojó de sus manos más bolas de fuego, pero fallando en su ataque.
El sargento intentó acercarse, esquivando ramas encendidas y otros obstáculos, para poder flanquear al objetivo. Las risas, desquiciantes, no cesaban, y el ataque se hacía más intenso. Aldo cuidaba cada bala, pero fallaba en cada disparo. El sujeto se acercó más a su presa para propinar un ataque más; mientras encendía otra bola de fuego, Javier le disparó a ésta, haciendo que él se prendiera en llamas, y luego le dio un tiro fulminante en la cabeza. Cayó el cuerpo inerte al suelo.
La iluminación volvió a la normalidad. Los vecinos salieron cargando cubetas de agua para apagar el fuego.Al final, registraron el cuerpo apenas identificable. En su bolsillo encontraron un anillo de oro con una N de diamantes incrustados, así como algunas identificaciones. Positivo. Aldo se comunicó a la comandancia.
-Aquí la niñera. Blanchet muerto. No sé si me creerán lo que pasó.